Los hermanos peligrosos de la princesa

Lestia, que creció en los barrios bajos con su tío borracho y se las arreglaba para llegar a fin de mes vendiendo flores. Una noche cuando su tío, que estaba amenazado por los matones por su deuda, trató de venderla.
"Oye, quítale las manos de encima".
Un grupo de hermosos chicos apareció de la nada. Derrotan a los matones a la vez y le dicen cosas increíbles a Lestia.
"Es un placer conocerte finalmente, mi hermana".
Sorprendentemente, era hija del duque de Verchester, una familia que ha producido magos durante generaciones. Pero es difícil creer esas palabras sin ninguna prueba.
“Vamos, Lestia. Vamos a casa."
Pero, ¿quería aferrarse a alguna esperanza? Agarró las manos de los niños, un poco impulsivamente.